Buenos Aires, 13 de Julio de 2022 — En 1982, fruto de un encuentro de voluntades a favor de la unidad del cuerpo de Cristo, pastores referentes decidieron crear la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la Republica Argentina (ACIERA). Que hoy cumple sus primeros 40 años de existencia (#ACIERA40A) y que celebrará el próximo 6 de septiembre de 2022 en el Centro Cultural Kirchner (CCK), ubicado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En la ocasión se presentará una obra musical con figuras de renombre del ámbito artístico y el Coro Polifónico Nacional Evangélico, que fue motivo de alegría durante la celebración de los 500 años de la Reforma celebrados en el Teatro Colón hace cinco años.
ACIERA se fundó como una institución basada en el consenso mayoritario de la Iglesia Evangélica en Argentina a fuerza de su identidad interdenominacional y de la inclusión del movimiento de iglesias evangélicas independientes, todas las cuales hallaron en esta Alianza un lugar de representatividad y unión fraternal. Más tarde ministerios, entidades de servicio y las propias iglesias que componen las diferentes denominaciones fueron afiliándose y acercándose a gestar un espacio de encuentro, de compañerismo y unidad fraterna.
ACIERA posee una estructura nacional con delegados provinciales en los 24 distritos a la vez que cuenta con delegaciones zonales y regionales para vincular al cuerpo en todo el país. Trabaja con las demoninaciones de manera directa, como también con los Consejos Pastorales, llevando a cabo un plan de federalización nacional. Como también haciéndose presente en el acercamiento a la sociedad en medio de la pandemia por el Covid, asistiendo a comunidades y familias enteras con donaciones de alimentos y elementos de primera necesidad. Colaborando con ayuda humanitaria a Ucrania, pero no dejando de lado a las víctimas de los incendios en Misiones, por ejemplo. Fortaleciendo las relaciones con capellanes de las fuerzas vivas del país, como también con los Cascos Blancos, con quienes están en el poder legislativo que comparten nuestra misma fe, con los movimientos defensores de la vida o que trabajan en pos de la niñez, la adolescencia y las familias.