Declaración de interés del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto: Resolución – 2019-27-APN
Por cuarto año consecutivo, ACIERA lleva adelante la Cadena Nacional de Oración, en donde cada provincia o región tiene a su cargo, en el período de una semana, movilizar a las iglesias evangélicas a orar con la sociedad por los temas referentes a la provincia y al país, acercándose a las autoridades de gobierno, líderes institucionales, fuerzas vivas, referentes de la sociedad civil, y cerrando dicha semana de oración con una expresión pública con las iglesias.
En ese sentido, la provincia de Tucumán, a través del MAP (Ministerio Pastores Amigos), presidido por el pastor Fabio París, tuvo a su cargo la semana de oración desde el 3 al 9 de febrero. Durante la misma, los pastores pertenecientes a dicho consejo dispusieron en las congregaciones que pastorean, organizando los cuatro puntos cardinales de la provincia y el centro, orar y ayunar por el país, las autoridades gubernamentales, por la elección del próximo Presidente y las familias; el no avance de la ideología de género, la violencia contra la mujer, el aborto y la trata de personas. Como así también, interceder por nuestro querido país vecino, Venezuela.
La Cadena Nacional de Oración continúa en la zona norte del Conurbano Bonaerense, más precisamente en la ciudad de Campana desde el 17 al 23 de febrero. Una semana después desde el 24 de febrero al 2 de marzo, será el turno de la provincia de Formosa.
Animamos a los consejos pastorales de todo el país a sumarse a la CADENA NACIONAL DE ORACION, en un año clave para nuestra nación.
Motivos de Oración – CIONA (Cadena Internacional de Oración por la Niñez y la Adolescencia)
La semana del 18 al 24 de febrero, oramos por:
LA IDEOLOGIA DE GÉNERO Y SU
INFLUENCIA EN LA VIDA DE LOS NIÑOS
Oramos por :
– La protección de la mente y el corazón de los niños y adolescentes de nuestro país.
– Los padres de familia cumplan con su rol de sacerdote orando en su hogar y compartiendo la Palabra de Dios.
– Los cristianos y todas las personas de buena voluntad, tengan la valentía necesaria para defender los principios de la vida y la familia. – El no avance de dicha ideología en materia legal.