(Madrid, 25/10/2012) El argentino Gastón Bruno, vicepresidente de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA) se encuentra de paso por Madrid, en la que es su primera visita a España.
Gastón Bruno (izq.) y Mariano Blázquez, esta mañana, en las oficinas de Ferede
Esta mañana, Bruno visitó las oficinas de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (Ferede), donde fue recibido por el secretario ejecutivo Mariano Blázquez, a quien conocía de una visita realizada por éste a Buenos Aires, Argentina -junto a otros líderes protestantes españoles- en el año 2007.
Además de confraternizar e intercambiar información sobre la actualidad institucional y eclesial de España y Argentina, el encuentro sirvió para analizar lo acontecido en la última sesión del Foro Iberoamericano de Diálogo Evangélico (FIDE), reunido los días 16 al 20 de octubre en Panamá. Cita a la que Blázquez en esta ocasión no pudo asistir (Ferede es miembro del FIDE) y sí lo hizo Bruno, en representación de ACIERA.
Con más de 11.000 iglesias y entidades afiliadas, ACIERA es la institución evangélica más grande de la Argentina y una de las más importantes de Latinoamérica. Sin embargo, Bruno, de 35 años, ejerce esa representatividad con ilusión y humildad, consciente de la gran responsabilidad que pesa sobre sus hombros y los enormes desafíos que aguardan por delante a los evangélicos latinoamericanos, pero a la vez entusiasmado por las grandes oportunidades que avizora en el horizonte.
Quizás por eso, Bruno mostró mucho interés en conocer todo lo concerniente a la naturaleza jurídica, estructura y desarrollo de Ferede que, en su opinión, ofrece una referencia muy importante, no solo para Argentina sino para toda Latinoamérica, región en la que las iglesias evangélicas, pese a su enorme presencia social -con millones de cristianos evangélicos en sus flas-, aún carecen de un adecuado reconocimiento jurídico acorde con su naturaleza religiosa y su realidad institucional.
Por su parte, Blázquez reiteró a Bruno lo que ya manifestara en otras ocasiones en distintos foros: su voluntad y deseo -que es también el de las iglesias representadas en Ferede- de avanzar en la cooperación fraterna y el mutuo apoyo institucional entre las iglesias y organizaciones representativas evangélicas de Iberoamérica. Para ello, en su opinión, «es necesario que el FIDE evolucione hacia una organización un poco más estructurada, con capacidad operativa para impulsar una agenda concreta».
El joven líder argentino, quien mañana viaja rumbo a Indonesia para participar en otro foro internacional, regresará a mediados de noviembre a Madrid, donde tendrá la oportunidad de entrevistarse con otros pastores y líderes evangélicos, antes de su regreso a Argentina.
Fuente: Actualidad Evangélica