Buenos Aires, 17 de julio de 2024.- Durante dos jornadas que tuvieron lugar los días 11 y 12 de julio, se celebró el Foro Regional del Sur para la construcción de la Agenda 23-33 de Libertad Religiosa. Este evento fue organizado por la Comisión de Libertad Religiosa y Derechos Humanos de la Alianza Evangélica Latina (AEL) en colaboración con la Comisión de Libertad Religiosa del grupo de abogados de la Alianza Cristiana de las Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA). El foro se llevó a cabo en las instalaciones de la Alianza, quienes brindaron su apoyo para la realización del evento.
El Foro Regional del Sur fue una continuación del Foro Andino, que se había realizado la semana anterior en Lima, Perú. Ambos eventos forman parte del plan estratégico y operativo de la Comisión de Libertad Religiosa y Derechos Humanos de la Alianza Evangélica Latina. (AEL).
Hubo una amplia participación de invitados, incluyendo panelistas de renombre. Asistieron alrededor de 25 personas, entre abogados, políticos, pastores, periodistas y teólogos, provenientes de Chile, Bolivia, Perú, Brasil, Uruguay y diferentes regiones de Argentina.
El foro comenzó con una reflexión teológica a cargo del pastor Jorge Gómez, director ejecutivo de ACIERA. A continuación, la Dra. Marilina Hotton, del grupo de Libertad Religiosa de ACIERA, inauguró formalmente el foro, cediendo la palabra al Dr. Agustín Aguilera, de Bolivia y encargado del grupo de Libertad Religiosa y Derechos Humanos de la AEL.
La primera ponencia estuvo a cargo de la Dra. Teresa Flores, de Perú, representante del Observatorio de Libertad Religiosa (OLIRE), quien habló sobre los alcances, limitaciones y vulneraciones a la libertad religiosa en la región.
Posteriormente, la Dra. Grisel Pereyra, ex diputada nacional de la República Oriental del Uruguay, ofreció una exposición sobre los fundamentos bíblicos de la libertad religiosa y los derechos humanos.
Tras una ronda de preguntas, el pastor Dr. Christian Hooft, presidente de ACIERA, saludó a los participantes y compartió información sobre los trabajos actuales de la Alianza y la comisión de abogados en temas de libertad religiosa.
Después de un almuerzo, los paneles continuaron con la exposición de la Dra. Marilina Hotton sobre autonomía, neutralidad y relaciones con el Estado.
Luego de una nueva ronda de preguntas, los participantes, divididos en tres grupos, trabajaron en propuestas, defensas y conclusiones para enriquecer la agenda del plan estratégico.
El segundo día comenzó con un panel sobre las situaciones actuales de la libertad religiosa en los países participantes del foro. Expusieron el Reverendo Emiliano Soto por Chile, la Dra. Grisel Pereyra por Uruguay, el Dr. y pastor Joao Luiz por Brasil y el Dr. Adrián Maldonado por Argentina.
La última ponencia estuvo a cargo del Dr. Gustavo Grancharoff, miembro del Consejo Argentino para La Libertad Religiosa (CALIR), quien, por su expertise, abordó temas actuales de libertad religiosa y diálogo interreligioso.
Durante el evento, se exploró la historia cristiana, destacando la significativa contribución de los cristianos evangélicos en los movimientos democráticos, el desarrollo y la educación en América del Sur. También se analizó la situación de la libertad religiosa y los derechos humanos en los países participantes, estableciendo paralelismos y señalando la necesidad de avanzar en el fortalecimiento de la autonomía de las iglesias y la neutralidad del Estado, evitando intromisiones ideológicas en las confesiones religiosas.
Se definieron objetivos regionales con el compromiso de trabajar durante el año para elaborar un plan de acción definitivo sobre libertad religiosa. El foro resultó valioso en términos de instrucción, conversación y producción, subrayando la necesidad de seguir colaborando en el desarrollo y la propuesta de la Agenda 23-33.
El Foro Regional del Sur concluyó con un espíritu de colaboración y compromiso, dejando en claro la importancia de la libertad religiosa en la región y la necesidad de continuar trabajando juntos para proteger y promover estos derechos fundamentales. Los participantes se marcharon con nuevas perspectivas y un renovado entusiasmo para contribuir al desarrollo de la Agenda 23-33. Sin duda, este evento marcó un paso significativo hacia un futuro donde la autonomía de las iglesias y la neutralidad del Estado sean respetadas y fortalecidas, promoviendo un entorno de verdadera libertad religiosa para todos.
