Frente a los sucesos ocurridos y pronostican que seguirán dándose por el huracán denominado Irma y los siguientes José y Katia, nos unimos en oración por aquellas personas que les fueron arrancadas todas sus pertenencias, que han perdido familiares o que están esperando los efectos del huracán en sus ciudades. También por las víctimas y familiares de víctimas fatales del sismo que ocurrió la noche del 7 de septiembre en las ciudades de Oaxaca, Chiapas y Tabasco, México.
Damos gracias por aquellos países como Puerto Rico y República Dominicana donde el efecto del ciclón fue mínimo respecto a lo esperado. Oramos por los habitantes de diferentes islas del Caribe que recibieron la furia de la tormenta y quedaron devastados. Rogamos por los habitantes de los países de Haití, Cuba y el estado de Florida en Estados Unidos. Velamos por las personas a quienes el sismo afectó.
ACIERA hace extensivo este llamado a la oración al pueblo de Dios para bendecir y velar por aquellas personas en necesidad. No sólo por consecuencia de estos ciclones, sino por toda necesidad, y especialmente por aquellos que aún no han encontrado a Cristo.
Vamos al Padre pidiendo protección y lo hacemos confiadamente, sabiendo que Dios es el Creador de los cielos, la tierra y el mar. Confíen en el Señor Jesucristo, quien dejó al Espíritu Santo para interceder ante el Padre por cada uno de nosotros, que les cuidará.
¡Pueblo mío, confía siempre en él!
¡Háblenle en oración con toda confianza!
¡Dios es nuestro refugio!
Salmos 62:8 DHH
También animamos a quienes están en la zona de riesgo a seguir las instrucciones de las autoridades de sus ciudades, a tomar medidas de protección, cuidado y evacuación si es así se requiere. ¡No se asusten! ¡Dios es nuestro refugio!
En adición adherimos al comunicado de oración de la Alianza Evangélica Latina (AEL), la cual ACIERA integra.
CONSEJO DIRECTIVO NACIONAL DE ACIERA